La Conversación: La Acción Detrás De La Acción
¿Has escuchado frases como estas? «Lo que importa es la acción, no las palabras», «el líder predica con el ejemplo» o «la cultura organizacional no es lo que se dice, sino cómo se hacen las cosas». Estas y muchas otras expresiones las hemos heredado y repetido hasta el cansancio. Pero, ¿es realmente así? ¿De verdad las palabras no tienen relevancia en la gestión? …¿O acaso son solo medias verdades?
Esto te lo explicaré en tres contextos.
1. Reuniones, WhatApps, Correos y otros
¿Qué tiempo de tu día lo dedicas “hablando” con otros?
Si ocupas una posición de Gerente hacia arriba, es casi seguro que supera del 50-60% por ciento del tiempo. ¿Para qué lo haces? Para definir y/o clarificar acciones o comportamientos que alguien debe hacer para cumplir una tarea y, por ende, lograr un objetivo.
Si te das cuenta, no estás comunicando (compartiendo mensajes o información) estás conversando para llegar a acuerdos.
Visto de forma opuesta: si no haces esas actividades, tienes las manos atadas para el logro de tus objetivos y los del equipo. En igual medida, para definir e implementar proyectos, en poner en marcha los cambios o cualquier estrategia particular del negocio.
2. Feedback/Feedfoward
Una de los temas más demandados es la retroalimentación (feedback) o la retroalimentación adelatada (Feedfoward). Esta es inmensamente dependiente del “decir”. Cuando no se tiene habilidades del lenguaje para expresar lo que observa y lo que se quieres, se hace ineficaz y muchas veces genera inconvenientes evitables y no deseables.
Todo este proceso es 100% conversacional y nada tiene que ver con acciones tradicionales que tanto se resaltan
3. Clima Organizacional
El clima organizacional es una de las mediciones típicas para conocer el bienestar y cuan sano es el ambiente de trabajo.
Identifiquemos tan solo tres preguntas típicas:
a. ¿Cómo describirías la relación que tienes con tus compañeros de trabajo?
b. ¿Sientes que tu líder o supervisor inmediato te apoya y escucha tus opiniones?
c. ¿Te identificas con los valores y la cultura de la organización?
En las dos primeras, se hace evidente que te están preguntado por la calidad de las habilidades conversacionales de tus colaboradores. En la última, tiene que ver con los entendimientos, los cuales muchas veces no son claros, y tiene que ver con una inadecuada comunicación de los mismos.
Definitivamente las frases inicialmente citadas, son medias verdades.
Es hora de re-entender el valor del decir, más bien conversaciones, dentro del proceso gerencial y de liderazgo y como parte esencial, con tecnología o no, para hacer trabajo, como pilar de la cultura organizacional y como base para lograr el propósito y los objetivos empresariales.
Detrás de cada acción (física u obra) hay conversaciones que la generan, y viceversa. Es decir, una acción me lleva a una conversación y una conversación a una acción. Son dos caras de una misma moneda y pretender opacar una, es dejar de aprovecarla.
La conversación es una acción, igual que la acción misma (o lo que venimos entendiendo como acción).
Esto y más, comparto en mi libro CULTURA DE CONVERSACIONES, el cuál está disponible en Amazon.
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